viernes, 25 de febrero de 2011

DESEMBARQUÉ, por Nerea Galán

Desde Cádiz, y en primicia mundial, este poema de Nerea Galán, Nerea Galán Fernández, provisional (¿sólo?) y felizmente fagocitada en o por el corazón de la vieja ciudad.



Desembarqué
cansada
en tus formas
y el fluir vivaz por tus arterias me aceptó en su ritmo
en la sangre misma del corazón flotante
que se enamoró de mí y me prometió la Gloria
−pude besarla nítida en una esquina de tu cuerpo−.

Es tan mío el Amor que se hace patria.

Derramas la Historia en fragores de piedra
y ser fluido empujado
por tus latidos antiguos
solidifica mi voluntad como una catedral
que albergara un altar legendario
donde sacrificara mi otredad;
vigilo enredándome en tus torres
el bosquejo marítimo que únicamente
confiesas a la luz que lo ilumina
pero algún día sabré el motivo
de tu vaguedad inasible y mitológica,
la noche que guardas en tus días
y asiré la empuñadura de tus mañanas de plata
para segar la piedra, para abrir el mármol
de tu memoria enterrada en relojes de arena.
Entretanto como un istmo
mi estrecha piel, mi piel hecha tal vez de calamita
recibe el vibrato
de los estertores de tu nieve:
jonda, dulcísima revolución
que me llega a través de tus ventanas
−ventanas del mar−
que dan a calendarios sin septiembre,
al mudo despertar
de la mañana sin futuro,
a las tres de la tarde
−demasiado tarde, nunca todavía−
de la que siempre friega
con agua fría el olor a yerma,
a la cena áspera de una mesa camilla
−donde se sirven el silencio
de la droga y el subsidio−,
al brindis sin cristal de madrugada...

¡A mí me tocó vivir
en el pecho arqueológico de Argantonio,
recibir el aguardiente de la copa
vacía de la niña de los peines
devorar tu genoma opuscular
con mi corazón de cartapacio!

Déjame repartirte, llegar al centro
en que tu corazón pagano canta de éxtasis
y redime al hombre de su pecado mortal perecedero:
el de ser hombre
porque no se es la tierra.

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                            Nerea Galán Fernández, "Desembarqué", poema inédito de libro en marcha (2011)

2 comentarios:

  1. Sinuoso como el rastro del mar en la roca, claro oscuro de imágenes cotidianas cargadas de luz...y sombras.
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    Lilian Delgado

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  2. Emocionante palabra. Aliento salobre. Voltereta acropolitana. Lina Wertmuller.

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